La Luz - El Renacimiento

Ya la palabra en sí denomina a este periodo, El Renacimiento o vuelta a la Luz.

El Renacimiento apareció allá por el siglo XIV en Italia, para extenderse en los siguientes 3 siglos por toda Europa. Aunque es en Italia donde tiene su máximo exponente.

En los albores del renacimiento es cuando nace un nuevo estilo arquitectónico que es el Gótico y se empiezan a construir las nuevas e imponentes catedrales, que darán paso de las estructuras bajas y con ventanas estrechas y mucha oscuridad en su interior, a un nuevo estilo de grandes ventanales de vidrieras con muña luz e inmensas alturas. Adornadas con contrafuertes y altísimas agujas cuyo objetivo era alcanzar los cielos, pero a nivel práctico permitía ubicar a las grandes poblaciones a una larga distancia. Esto es la luz

La moda renacentista es como las catedrales, con mucho color y nuevos tejidos como las sedas introducida por los mercaderes venecianos que dan a las prendas de vestirla luz y movimiento.

La ciudad de Florencia fue la que dio un gran impulso a este nuevo estilo tanto en la pintura, escultura, arquitectura y moda.

La moda femenina se va haciendo más rígida y pesada. El traje femenino se compone de la camisa, que asoma bajo el vestido con escote cuadrado o barca, encima llevaban el jubón o Vesta que llevaba en su interior en la falda el verdugado o el tambor para dar volumen a las faldas. Aparece el acuchillado en las prendas exteriores para dejar ver las camisas interiores.  El uso de las sedas, damascos y brocados dan un mayor colorido y vistosidad a las prendas. Los tocados siguen siendo enormes y los zapatos tienen las puntas cuadradas y empiezan a tener tacón.

La moda masculina del renacimiento tiene como prenda principal el jubón y la calza, esta última venía ya de la alta edad medida. Empezaron a usar pantalones cuya característica principal era el braguero y los acuchillados, que también se utilizaban en los jubones para dejar ver los tejidos interiores.

También el hombre utiliza mucho color y sedas y terciopelos conforman los tejidos de las prendas masculinas. Aparece el cinturón para ajustar el jubón y para colocar una pequeña daga o espada. Los calzados masculinos se componen de unas largas babuchas con una punta muy exagerada y comienza a aparecer el botín con la punta más cuadrada y tacón. También llevan gorros y sombreros muy ajustados a la cabeza y con el avance del periodo van adquiriendo más volumen.

El estilo renacentista se extiende por toda Europa dando lugar a diferentes estilos según la región. Italia, Flandes, Francia, España e Inglaterra con su estilo Tudor marcan la pauta del arte y la moda renacentista de los siglos XIV, XV y XVI.

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